lunes, 18 de junio de 2012

1923 - The Ten Commandments


Ya era hora de ponernos al día con Taschen. La verdad es que me cuesta un poco cuando se trata de ver algo de los años 20, pero no iba a dejar pasar otro día desde que Marcos me dijo que ya me había conseguido la película. Así que ayer, día nublado y tarde de domingo, teníamos 2 horas y 16 minutos para verla, y tengo que decir que la disfrutamos.

"The Ten Commandments" es una película de 1923, dirigida por Cecil B. DeMille. Cuentan en el libro una anécdota curiosa sobre la película.
Corría el año 1922 y Los Angeles Time juno a la compañía Famous Players-Lasky, organizaron un concurso. Se sortearon 1000 dólares a quien viniera con la idea más convincente. En la oficina de DeMille estaban asombrados ¿era la Biblia un buen recurso para hacer una película que fuera aclamada por el público?. Fue F.C. Nelson, quien dijo que le gustaría ver una película sobre Los Diez Mandamientos. De hecho fue el quien incluso propuso el eslogan que es utilizado en la película: "You cannot break the Ten Commandments - they will break you".
Nelson y otros 7 concursantes, que eligieron el mismo tema, ganaron 1000 dólares cada unos. Cifra ridícula, teniendo en cuenta que la película hizo 4.2 millones de dólares en taquilla.

La película, dividida en dos partes, comienza con el Éxodo de los israelitas de Egipto, reflejando la abertura del Mar Rojo y el momento en el que Moises recibe Los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí, y por último la celebración alrededor del Becerro de Oro.
De repente te traslada a la casa de una familia americana de los años 20, una madre profundamente religiosa, intenta trasmitir (o imponer) sus creencias a sus dos hijos, pero estos no son igual de receptivos. A partir de ahí es todo el desarrollo de la película que, en definitiva intenta trasladar los temas reflejados en el Antiguo Testamento a la vida actual.

Y de postre... Tarta de Mascarpone y "Berries" (Black and White Tart en el libro de Nigella). Les dejo la receta debajo con algunas variaciones. A Paco y a mi nos encanta y es muy rápida de hacer.

¡Feliz semana!





miércoles, 13 de junio de 2012

¡VAMOS! Festival, Los Tarantos y queque de yogurt

El Lunes por la tarde hice queque de yogurt con la receta que trajo mi hermano Alfonso a casa cuando tenía 6 o 7 años, todavía mi madre la guarda, la escribió él con su profesora, que se la iba dictando a toda la clase, está escrita en una hoja pequeña de cuadros, con su caligrafía infantil. Y es el queque por excelencia en casa, súper fácil de hacer y buenísimo. Aunque yo he ido añadiendo cosas a la receta original, la base es siempre la misma



Después de mi ratito de cocina, nos pusimos a preparar la presentación que Paco tenía que hacer para la película Los Tarantos en el ¡VAMOS! Festival. Estuvimos viendo este documental de televisión española que se hizo sobre ella, a mi personalmente, salvo las entrevistas a los actores y alguna cosa más, en general no me gustó, no se... no lo volvería a ver.

Leyendo y buscando sobre la película que rodó Francisco Rovira en la década de los 60, descubrimos que fue nominada a los Oscars como mejor película de habla no inglesa, nos enteramos también que Carmen Amaya murió y no llegó a ver la película terminada, y yo, que a ella no la había visto nunca bailar, me quedé impresionada de la fuerza que tenía, sólo por verla a ella la película ya merece la pena. Siempre se ha visto como una versión de la obra de Shakespeare, Romeo y Julieta, a lo gitano, a lo que Rovira dijo en su momento, que si Shakespeare hubiera conocido a los gitanos, probablemente no hubiera escogido Verona como el lugar donde desarrollar su obra.
La película que se rueda en Barcelona en el desaparecido barrio del Somorrostro, tiene una doble lectura, Gamboa dijo sobre ella que las dos familias gitanas, los Tarantos y los Zorongos  representaban, de alguna manera, las dos Españas del momento...

Les dejo debajo una foto de Paco introduciendo la película :-) y el trailer de la misma. Yo la disfruté muchísimo y creo que el público que estaba ahí, incluso careciendo de subtítulos, también lo hizo.






domingo, 10 de junio de 2012

Cupcakes de zanahorias y nada de cine

La entrada de hoy se la dedico a Fefita, por ser como fue, una mujer maravillosa y entrañable, por partirme el queso de plato, por preguntarme siempre si quería algo, por su carisma, por su cariño desinteresado, por su sonrisa, por esa vocecita que tenía... y a Cris, y a la familia de Cris, por permitirme sentir que, de alguna manera, soy parte de ustedes, o ustedes mía. Los quiero.

Este fin de semana no ha habido películas, raro, pero no hemos visto nada, y tenemos algunas pendientes y el tiempo ha estado horrible (como de costumbre) así que hemos pasado tiempo en casa, pero no se porqué, no ha habido cine. Y de hecho, no pensaba escribir, pero tenía algunos motivos.

Gracias a la nube gris, la lluvia y el viento, he permanecido algo recluida este fin de semana, excepto ayer, que fuimos a comer fuera para decirle a Katya; "hasta luego", porque se va a vivir a Londres.
El caso es que como al mal tiempo hay que ponerle buena cara, me apeteció hacer unos cupcakes de zanahoria. Y como la vaguería es una característica propia de mi, en vez de buscar en los miles de libros de cocina que tengo, lo "googleé," mi verbo preferido. "Carrot cupcakes Nigella", "buscar en google" y me apareció este blog. En el texto añadí Nigella, que es una cocinera británica de la que tengo un par de libros. La casualidad es que leyendo la receta en el blog, era de uno de los libros que tengo, "How to be a domestic Goddess, sí, el título se las trae, y encima fue regalo del señor Paco, por mi 26 cumpleaños, menos mal que me encanta que me regalen libros de cocina (entre otros) e hice como si no me hubiera dado cuenta ;-)









 Disfruten de lo que queda de domingo :-)


viernes, 1 de junio de 2012

Biutiful y Curry Verde para la tarde del miércoles.

El miércoles Paco y yo nos quedamos en casa, había llegado un poco más tarde de lo normal porque estuve cuidando a la hija de Vania e Ivan, así que no salimos, nos quedamos disfrutando en casa de un "home made" curry verde tailandés y vimos Biutiful.
En resumen, la comida picante y la película amarga. Pero un picante bueno, agradable, nos encanta ese curry, lo probamos por primera vez en una cafetería pequeñita que hay en Newcastle, en el barrio chino, Bangkok café, se llama, y nos encantó, y en Febrero, lo comimos en Tailandia, con Cris e Ivan, un par de veces, qué maravilla la comida tailandesa, así que nos compramos un libro de recetas en una librería preciosa que Cris nos recomendó. Les dejo la receta debajo, con variaciones, porque yo no encuentro los "eggplants" que son como una especie de tomates pequeñitos verdes que por dentro parecen calabacines, en Bangkok los comí alguna vez, y son bastante suaves.






La película, amarga, porque muestra algunos de esos sin sabores de la vida, algunas de esas cosas que no nos gustan, que nos dan rabia, las injusticias, los sentimientos encontrados, un realidad presente que a veces ignoramos o de la que somos ajenos, que nos hace daño. El escenario, Barcelona, que como toda gran ciudad recoge no solo la belleza si no también la dureza de la vida. El protagonista Bardem, te gusta o no te gusta. La historia, complicada, compleja, dura. La música nos gustó, y confirmamos (porque Paco comentó durante la película " me da que es el mismo compositor que...") que era el mismo compositor que el de Diarios de Motocicleta, Gustavo Santaolalla. Y la fotografía, el ojo que pone la película, a mi me gustó muchísimo, me pareció que acompañaba la historia  a la perfección, había armonía entre lo que se contaba y lo que se veía, así que cuando llegaron los créditos, me quedé con el nombre, Rodrigo Prieto, y descubrí, que era el mismo director que películas como Frida, Amores Perros, Babel... 
La película ha sido nominada y en ocasiones premiada, en los Goyas, el festival de Cannes, los Oscar, Globos de Oro, yo personalmente, la recomiendo.
Debajo el trailer, disfruten del viernes, San Viernes, como dice mi primo Jose =)